Ni la vigencia del Principio de la prohibición del recurso de la fuerza en el derecho internacional de nuestros días, ni los esfuerzos por erradicar la violencia en las relaciones sociales en el doble plano interestatal e internacional, han conseguido liberal a la humanidad del azote de la guerra. Sigue estando presente por doquier distintas causas que son fuente del conflicto a menudo cruentos: la disputa por los recursos, las reivindicaciones territoriales, la conflictividad social provocadas por situaciones de injusticia de las que derivan grandes desigualdades en el nivel de desarrollo del individuo y de las colectividades, la pugna ideológico - política, la intolerancia religiosa, el odio racial o étnico, los graves abusos del poder que no en pocos Estados conlleva a la supresión de los derechos humanos más fundamentales, los nacionalismos exacerbados... causan todas ellas a la que la comunidad internacional debe enfrentase ante todo en un enfoque preventivo, desarrollando actuaciones orientadas a acabar con las injusticias sociales, promover el desarrollo y la democratización y hacer prevalecer un espíritu de tolerancia sobre las intransigencias y las exclusiones que sucinta toda suerte de tensiones.
la Comunidad Internacional debe tener un enfoque preventivo en la lucha contras las causas de los conflictos
Comments