La Corporación Jesús María Valle y la Mesa de Derechos Humanos del Valle de Aburra, muestra su preocupación y lanza una nuevamente una alerta temprana por las constantes fallas en el sistema Metro de Medellín y la falta de mantenimiento, que pone en inminente peligro la vida y seguridad de los usuarios

La Corporación Jesús María Valle y la Mesa de Derechos Humanos del Valle de Aburra, muestra su preocupación y lanza una alerta temprana por las constantes fallas en el sistema Metro de Medellín y la falta de mantenimiento, que pone en inminente peligro la vida y seguridad de los usuarios, denuncia que en el día de ayer 31 de marzo de 2015, siendo las 6:15 pm, la estudiante, empleada de la fundación de la Universidad de Antioquia y conductora del metro la señorita Paola Franco, reporto una novedad en la estación del Poblado, cuando se dirigía con dirección a la estación de Niquia, en hora pico, donde el tren se encuentra en su máxima capacidad transportando más de 1.000 personas. Al momento de su partida en la estación de la Estrella, el tren del metro compuesto por la unidad 19B y unidad 11, se encontraba al 75 % de potencia en sus motores, al llegar a la estación del Poblado la conductora Paola Franco, informo que otro motor del coche B de la unidad 19B se había averiado y que solo contaba con un 50% de potencia de tracción en los motores. Al llegar a la estación Industriales reporto que el tren presentaba una fuerte vibración y que lo más recomendable era evacuar a los usuarios del tren por la seguridad, en ese momento no le permitieron seguir hablando para que no quedara grabado en el récor. Es de conocimiento técnico que dicha novedad podría generar fallas más graves en el sistema, o producir una tragedia, tales como: a) fallas en la comunicación del PLC sistema de vigilancia y control del tren (las unidades no se comunican entre ellas), produciendo un desacople eléctrico entre las unidades por lo tanto el tren no recibirá ordenes, igualmente se puede detener en inter-estación, lo que implica que la evacuación de los usuarios es más compleja y peligrosa, b) no hay control de los frenos y como el tren viajaba en sentido Niquia, el perfil de esta vía es en descenso, los frenos se calientan emitiendo un olor a quemado y con una capacidad de soporte máximo por la cantidad de usuarios en hora pico, el riego en vida sería incalculable, c) fallas de fuego en equipos de tracción, Con todo este inminente peligro, el puesto central de control dirigido por el supervisor de operaciones, tomo la decisión irresponsable, imprudente y necia de no evacuar el tren y prestar el servicio comercial, con un atrasó de más de 15 min, degradando el servicio hasta la finalización. La Corporación Jesús María Valle y la Mesa de Derechos Humanos expresa su preocupación ante la posibilidad de que se presente una tragedia en el metro de Medellín por la falta de mantenimiento oportuno y las correctas decisiones en el respeto de los protocolos de seguridad donde prime la vida y seguridad de los usuarios.

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