Por: ALEX ALBERTO MORALES CORDOBA
Es necesario ganarle a las ideologías
de guerra y ese es el compromiso de los ciudadanos, de la gran mayoría de
nosotros y vamos a ponerle todo nuestro empeño, dedicación y conocimiento.
Es por eso que debemos exigirle
al Alcalde de Medellín que se ponga serio, que este no es el reality show de Super
Humanos, que estamos es en el campo de la política real y verdadera de
seguridad humana, donde sus decisiones no pueden ser caprichos de su estilo bacanal
y relajado.
Esta es la ciudad de Medellín, una
de las más importantes ciudades de Colombia y todas las acciones de los
representantes deben estar enmarcadas dentro del Estado Social de Derecho con
una democracia participativa en la toma de decisiones.
Es un hecho notorio, cierto y de público
conocimiento la animadversión que tiene el señor Federico Gutiérrez, sobre
cualquier proceso de paz y por lo tanto su actuar es guerrerista, de
sometimiento, autoritario y dominante, contrario a los nobles principios filosóficos
de nuestra carta Magna de 1991, que brinda las herramientas para que los
gobiernos actúen con alma de paz, de inclusión,
de perdón y reconciliación.
Pero afortunadamente le recuerdo
que estamos en ese Estado Social de Derecho, donde todos estamos obligados a
cumplir con las normas y su conducta administrativa señor Alcalde debe estar
acorde a la Constitución Nacional, a las leyes y al plan de desarrollo 2016-2019
, aprobado por el concejo municipal mediante el acuerdo 03 de junio de 2016, es
decir, usted no puede actuar contrario a estas normas conductuales y si por si
acaso se le olvido le quiero recordar lo que preceptúa:
MEDELLÍN CUENTA CON VOS PARA
CONSTRUIR LA PAZ EN EL TERRITORIO, donde invita a “la ciudadanía hacer de Medellín
un territorio de paz” y manifiesta que “Hoy más que nunca se debe trabajar
desde la corresponsabilidad para la
construcción de confianza y la
reconciliación, y para la generación de una convivencia pacífica en los
territorios que deje atrás la cultura violenta y alcance una cultura de paz”.
Que el Objetivo de este plan, es reducir las diversas formas de violencia
en el entorno, a través del fortalecimiento de la comunidad, de tal forma que como
territorio estemos preparados para la construcción de paz y post acuerdo.
Que su dimensión estratégica de
seguridad y la convivencia ciudadana, cuenta con un Reto fundamental: Medellín cuenta con voz para la construcción de
la paz en el territorio, y para alcanzar este reto se establecieron los
programas, 2.3.1 Promoción de los derechos humanos 2.3.2 Postacuerdo y
garantías de no repetición 2.3.3 Memoria para la construcción de la paz 2.3.4
Ciudadanía activa por la paz 2.3.5 Atención a víctimas del conflicto armado.
Pero lo que está ocurriendo en la
ciudad con la Política de Seguridad y la Política Social es lamentable y
contrario al ordenamiento normativo, reducción del presupuesto en lo social en
más de un 50% y aumento en materia de seguridad, con su funcionario estrella en
Yarumito, y lo más asombroso es que el actual secretario en propiedad no tiene
la experticia y el conocimiento, una política de imposición del miedo, y
creyendo que todo se resuelve aislando, apartando, y encarcelando, desalojos
violentos y cientos de familias en las calles fruto de esta exclusión estatal y
con enfoque de seguridad para tratar estos tema, abandono de planes sociales, más de
15.000 prisioneros recluidos en esos centros y calabozos putrefactos, mal
olientes, e indignos, aumento en el índice de homicidio donde el alcalde se harta
de ser un experto y dar la cara, una crítica desde el desconocimiento jurídico y
autoritario hacia la rama judicial, en fin sería un sin número de errores en su
actuar contrario al plan de desarrollo.
Pero desde los territorios, desde
nuestras casas, cuadras, desde los más
de 400 barrios registrados y no registrados en nuestra ciudad, le decimos,
tenemos un sueño señor alcalde Federico Gutiérrez, y estamos listos para contar CON
VOS para la construcción de esta paz estable y duradera desde los
territorios.
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