Las Políticas Públicas contradictorias de Federico Gutiérrez


Para nadie es un secreto la labor titánica que emprendió el señor Luis Bernardo Vélez, como Secretario de Inclusión Social, familia y Derechos Humanos, en favor de las personas que habitan la calle en condiciones paupérrimas de miseria y abandono del Estado, con el objetivo de reincorporarlos al sistema actual que nos rige.

MISAEL JOSE JARABA LLANO, 67 años de edad, trabajando como vendedor informal 


El Secretario Luis Bernardo, es constantemente criticado en los corredores de la administración municipal por los tradicionales clientelistas, argumentando peyorativamente que esta población “indigente” no da votos.

Por otro lado, y es una verdad de perogrullo que es conocida por todos, que desde la Subsecretaria de Espacio Público se impulsa una de las políticas públicas más excluyentes, retrogradas, falsarias que revestidas de una manto de legalidad, impulsa actos de corrupción y abre más las brechas de desigualdad social y económica en la ciudad con sus respectivas consecuencias; tirando a la basura todo el minúsculos esfuerzo de sus mismos compañeros de gobierno del municipio, con el argumento de que todos tienen autonomía e independencia.

La FUNDACION SOCIAL PARA LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS, por sus siglas FUSOPAZ, presenta la siguiente denuncia pública, que desde el punto de vista de gestión pública y calidad de los intervinientes, consideramos es inaceptable y refleja la inexperiencia, la traición a la Constitución Política de Colombia de los funcionarios encargados de dar solución a la siguiente situación.

El señor MISAEL JOSE JARABA LLANO, es una persona mayor de edad, de 67 años, ciudadano colombiano, caracterizado como persona de doble protección especial constitucional, quien fue habitante de la calle por mucho tiempo.

Por medio de los programas de inclusión social fue recuperado de las condiciones paupérrimas y de miseria que vivía en la calles de Medellín, e inicio labores en la profesión de ventero ambulante informal en el sector de Carabobo, entre Ayacucho y Pichincha, todos los trabajadores del sector lo reconocen y pueden dar testimonio de buena fe y credibilidad  de sus oficios y de su exitosa recuperación. Hoy solo tiene la posibilidad de pernotar en un dormitorio social.

El día 6 de diciembre de 2017, fue desalojado por primera vez el señor Misael Jaraba, los funcionarios de Espacio Público le permitieron regresar a su puesto de trabajo en la temporada de diciembre exigiéndole cancelar la suma de $86.660 pesos, pero  el 9 de enero de 2018 fue desalojado nuevamente.

Por no encontrarse dentro de la “rosca politiquera”, corrupta de la administración municipal, ya que no se encuentra “regulado”, registrado (vacunado), en las listas que manejan las manos oscuras y perversas de la Subsecretaria de Espacio Público y sus aliados clientelistas fue desalojado de su habitual sitio de trabajo en el sector del centro de la ciudad.


Dicho desalojo tiene como motivación la necesidad de recuperar el espacio público para el tránsito de los turistas que están llegando masivamente a la ciudad más innovadora y el mantener el control rentístico que arroja los venteros ambulantes.

Por sus características sociales y personales y su alto estado de vulnerabilidad nadie de la administración municipal le ha solucionado su situación, vulnerando sus mínimos vitales y de dignidad humana de una persona que tiene derechos.

Requerimos que de forma urgente y prioritaria el señor MISAEL JOSE JARABA LLANO, sea nuevamente ubicado en su puesto habitual donde venía desarrollando su actividad informal, o que sea reubicado en el mismo sector.

Solicitamos no exigirle ninguna contraprestación económica, ni pedirle la vinculación a ninguna organización de carácter privado, como requerimiento para poder trabajar y desarrollar su actividad.

Notas al pie de FUSOPAZ:

1.     El alcalde de Medellín califica a los venteros informales como criminales, olvidando que ellos votaron por él,  utilizando las mismas prácticas de sus antecesores con esta población.
2.     El Secretario de Seguridad, el Joven Andres Tobón, es el superior jerárquico del Subsecretario de Espacio Público, pero por su inexperiencia y falta de conocimiento omite dar solución a esta situación.
3.     El Subsecretario de Derechos Humanos Carlos Arcila, no denuncia, ni realiza las gestiones pertinentes necesarias conociendo de la situación.
4.     El Secretario de Inclusión Social y Familia Luis Bernardo, argumenta que la política de la regulación del espacio público no es del resorte, y de su cartera.
       Son más de 22 mil venteros informales, en la ciudad de Medellín.
5.     Los venteros ambulantes fueron clasificados como regulados y no regulados, con el objetivo de tener un control para la actividad rentística y económica y para un control de proselitismo político.
6.   La población habitante de la calle y venteros informales están catalogados por la Corte Constitucional como personas  de protección especial constitucional.
7.    En la doctrina del clientelismo político los habitantes de la calle no son incluidos en sus ambiciones de poder.

8.      En la administración del señor Federico Gutiérrez creció del desempleo en la ciudad, 10.3 al 11.3 

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